lunes, 27 de febrero de 2017

Hablo con Mireia

Hablo con Mireia y ella me escucha. Mireia me habla y yo la escucho con mucha atención. Nos hablamos. Nos escuchamos. Siempre presente. 

No he dejado de hablar con ella ni un solo día, como casi solíamos hacer cuando Mireia vivía. Y ella no ha dejado de hablarme, aconsejarme, ayudarme, darme fuerzas y positividad. Es verdad que no recuerdo su última palabra antes de que la entubaran. Es verdad que no he podido ni ver un vídeo ni oír su voz en alguna de las múltiples grabaciones que tengo. No estoy preparado para eso y esto me duele por partida doble. Por no tener valor para hacerlo y porque echo mucho de menos esa voz tan dulce. Pero nos hablamos.

La primera vez que hablé de esta manera con Mireia fue ese 28 de septiembre del 2015 a solas, los dos, en la sala del tanatorio, sobre las 9,15.
- Mireia cariño, te quiero mucho. Te voy a echar mucho de menos. ¿Qué voy a hacer sin ti? ¿Qué vamos a hacer sin ti mami, los yayos, los tíos, los tatos, tus amigos...todos? ¡Qué vamos a hacer! Mireia, te quiero mucho. !Te quiero mucho, nunca lo olvides!
Y ella me respondió con esa sonrisa eterna
- Papi, tranquilo. Y levantando el pulgar, está todo ok. Te quiero. Os quiero. Estaré siempre. 

Y desde entonces no he dejado de hablar con Mireia. Nos contamos las cosas que nos pasan. Reímos. Cantamos. Lloramos. Hablamos. Nos queremos. Nos mandamos besos. Y hablamos en cualquier lugar, en casa, en el coche, en el hotel, en el cementerio, en los sueños, en la cama, en el sofá, en el pádel...en cualquier lugar.

Hablo con mi hija. Hablo con Mireia. Y Mireia habla conmigo. 

Hablamos de diferentes formas. Yo casi siempre con palabras, en voz alta o en pensamiento. Y Mireia me habla de miles de formas, con sus palabras que yo escucho en mi cabeza, con sus ya típicas "collejas de papi espabila", o con cada cosa que me sucede y muchas veces a través de la música. Parece que la música, las canciones, estuvieran escritas para que Mireia y yo habláramos. 

Mireia y yo nos hablamos. Mireia y yo nos escuchamos. 

#MireiaTeQuiero